martes, 24 de agosto de 2010

El tiempo se puede parar


Nunca pensé que después de tres meses podría sentir así. Hace tan solo, unos treinta días, creía que el tiempo se había parado para siempre. Que jamás, las pequeñas manillas del reloj de mi vida, volverían a seguir su tranquilo, pausado ritmo.
Hoy, parece que ha pasado una eternidad. Curioso, esto del tiempo.
No es que el tiempo todo lo cure. Lo curamos nosotros, si queremos. Y yo, quise.
Viéndolo desde la perspectiva del tiempo ya pasado, todo parece mas liviano, menos importante. "....a veces creemos que el tiempo se puede parar...", dice la canción de Shuarma. Lo creemos, pero en el fondo, sabemos que en situaciones así, afortunadamente, el tiempo...no para.

domingo, 15 de agosto de 2010

Gone with the water


Se fue con el agua, así se llama esta preciosa fotografía. Lo que no te mata te hace más fuerte, y sin lugar a dudas, yo, lo soy, un poquito al menos.
Afortunadamente, se fue, con el agua, la tierra, el viento y el fuego.
Gracias por hacerme abrir los ojos, la mente...y darme cuenta, realmente de las cosas importantes en la vida.
Ahora, sí, soy libre. Ya no hay dolor, dolor de corazón me refiero. Ese que te parte el alma en cachitos y te hace creer que jamás volverás a ser quien eras. Ese que te hace levantar cada mañana queriendo que el día pase rápido para volver a mullirte en la cama.
La Diosa vuelve. Curó sus heridas, recuperó su vida.