Adivíname esta noche de oscura lascivia.
Te imagino solo, tranquilo en la humedad de la noche,
soñando mis manos,
acariciando mi pelo, que al viento, ondea como la vela traviesa de un velero.
Adiviname inmersa en tu pecho de hombre.
Me imaginas lenta, ávida de tu olor que me embelesa,
gritando mi nombre,
amando mi alma, que gira y gira, loca de amor alrededor tuya.
Adivíname amor, no dejes de adivinarme....
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